Ley de Fraccionamiento Pesquero: pesca en disputa
por: Constanza Arévalo Meléndez
“Hace 18 años comencé con el tema de la pesca artesanal, siguiendo los pasos de mi papá, él fue uno de los primeros pescadores en la caleta y ahí fue surgiendo como una empresa familiar”, expresó Camilo Chávez, pescador de la caleta de Bucalemu.
La actual Ley de Pesca, conocida como Ley Longueira, fue promulgada en el año 2012 durante el primer gobierno de Sebastián Piñera. Esta normativa ha sido muy criticada por favorecer a las grandes empresas pesqueras, asignándoles cuotas de captura de manera permanente y heredable.
En 2023, el gobierno del presidente Gabriel Boric presentó un proyecto de nueva Ley de Pesca que busca reformar el sistema, incorporando principios de equidad y sostenibilidad. Sin embargo, su tramitación ha sido lenta, debido a la complejidad y extensión del proyecto.
Paralelamente, se impulsó la Ley de Fraccionamiento, una iniciativa más acotada que propone redistribuir las cuotas entre los sectores artesanal e industrial en 22 pesquerías claves, como la merluza común, jibia, sardina y anchoveta.
El principal objetivo de esta iniciativa es corregir las asignaciones actuales, que han sido consideradas injustas por el sector artesanal. Se propone que el sector artesanal obtenga un 70% de la cuota de la merluza común, en contraste con el 60% que posee la pesca industrial actualmente, en cuanto a la jibia la cuota artesanal aumentaría al 90% y el 10% restante para la industrial, entre otras.
Esta iniciativa plantea una redistribución en cuotas pesqueras que varía según la especie y la región, con un marcado énfasis en fortalecer el sector artesanal.
Camilo Chávez, quien es parte del Sindicato de Pescadores Artesanales de la Caleta de Bucalemu, afirma que desde la creación de la Ley de Pesca se ha favorecido al sector industrial: “El fraccionamiento, desde que hicieron la ley Longueira, siempre fue hecha para beneficiar a la industria, ya que ellos prácticamente son siete familias, las dueñas de las grandes pesqueras acá en Chile”.
Mientras se tramitaba la ley en la Cámara de Diputados, en marzo de este año, pescadores artesanales se manifestaron a lo largo del país y con mayor fuerza en Valparaíso.
Gigliola Centonzio, asesora en materia de legislación y administración pesquera de la Alianza Pesca Maule, una organización gremial sin fines de lucro que reúne a 11 agrupaciones de pesca artesanal, que busca tener incidencias en decisiones sobre administración y legislación pesquera, explicó que el motivo de la movilización fue visibilizar que las propuestas del sector artesanal no estaban siendo escuchadas
“El mensaje que quisieron hacer los pescadores artesanales con la movilización de marzo es visibilizar que no estaban siendo escuchadas las propuestas del sector pesquero artesanal en ninguna instancia, tanto en la instancia legislativa como es el Congreso Nacional en la Cámara de Diputados y en el Senado y como tampoco el ejecutivo, salieron a manifestarse dada la impotencia que sentían al no sentirse escuchados y que no estaban siendo acogida sus demandas”, detalló Centonzio.
Esta propuesta ya fue aprobada por la Cámara de Diputados y actualmente se encuentra en discusión en el Senado.
El diputado Comunista, Luis Cuello, reafirmó su compromiso con las caletas y los trabajadores del mar: “Desde ese punto de vista he estado apoyando no solamente en la defensa de las caletas, sino que también las manifestaciones que han hecho los pescadores y luego que hemos defendido en la sala los intereses de la pesca artesanal, porque me parece que es una oportunidad para para corregir una injusticia que nació en la denominada Ley Longueira, que es una ley de origen corrupto, donde se benefició a la industria a partir de la coima y el cohecho”.
Según el Servicio Nacional de Pesca (Sernapesca), el sector artesanal representa cerca del 90% del total de embarcaciones del país, pero recibe menos del 30% de las cuotas de captura de algunas pesquerías, lo que ha generado una fuerte demanda por parte del sector artesanal por una redistribución más equitativa.
Actualmente, la Ley de Fraccionamiento continúa su tramitación en el Senado, tras haber sido aprobada por la Cámara de Diputados. La iniciativa busca modificar la distribución de cuotas de captura en 22 pesquerías, con el fin de ajustar los porcentajes entre los sectores artesanal e industrial. La aprobación definitiva del proyecto dependerá del debate legislativo en curso y de la disposición tanto del Ejecutivo como del congreso para acoger las propuestas de los sectores pesqueros.